Presentan plataforma digital para la medición de emisiones de CO2 en vivienda

- Implementa el Benchmark Iterativo para Projetos de Baixo Carbono (BIPC), una herramienta desarrollada en colaboración con la Universidad de São Paulo (USP).
- Prioriza la medición de carbono incorporado en los proyectos estructurales vinculados al programa habitacional Minha Casa Minha Vida.
Lanza la Caixa Econômica Federal una plataforma digital desarrollada en colaboración con la Universidad de São Paulo (USP) que mide la generación de carbono incorporado en sus emprendimientos habitacionales financiados, con el objetivo de optimizar los diseños estructurales, reducir el consumo de materiales de construcción y, consecuentemente, disminuir tanto las emisiones de dióxido de carbono como los costos de producción.
La iniciativa, denominada Benchmark Iterativo para Projetos de Baixo Carbono (BIPC), fue presentada formalmente durante el evento “Habitação de baixo carbono: experiências globais e soluções locais” en la ciudad de São Paulo (SP), el pasado lunes 3 de noviembre, con la participación del presidente de la entidad financiera, Carlos Vieira.
El propósito principal de esta herramienta es apoyar las políticas habitacionales del banco al proveer información precisa sobre la sostenibilidad de los proyectos, estimulando de manera directa al mercado inmobiliario a incorporar métodos y prácticas de construcción más eficientes y con menor impacto ambiental. La reducción de emisiones es considerada por la institución como un factor determinante de rentabilidad empresarial y de mejora social.
Detalle de la Operación de la Plataforma BIPC
El enfoque inicial del BIPC se centra en los proyectos estructurales de los emprendimientos inmobiliarios, poniendo especial énfasis en aquellos que forman parte del programa Minha Casa Minha Vida. Este programa se caracteriza por un alto grado de estandarización en sus diseños de vivienda, lo cual ofrece una oportunidad para implementar mejoras estructurales a gran escala y maximizar la reducción de la huella de carbono por unidad habitacional. La estandarización facilita la replicabilidad de las soluciones de bajo carbono.
La plataforma permite a los usuarios analizar el impacto ambiental de los proyectos mediante la segmentación por tipología constructiva, número de pisos o por elementos estructurales individuales. Uno de sus elementos operativos centrales es la capacidad de comparar distintas simulaciones de proyecto. Esta funcionalidad permite identificar con precisión cuáles son los elementos estructurales —tales como vigas y pilares— y qué materiales específicos —como el hormigón o el cemento— son los principales responsables de la generación de emisiones de carbono incorporado.
La herramienta procede a contrastar las simulaciones de diseño con las mejores prácticas disponibles en el mercado internacional y local. Este proceso comparativo busca señalar las áreas de optimización en el diseño de los proyectos, haciendo posible el mejoramiento de la calidad de las viviendas y sirviendo como un catalizador para la innovación tecnológica dentro del sector de la construcción financiado. El sistema también dispone de un área de consulta pública que permite a la sociedad examinar la línea de base de carbono para diferentes tipologías constructivas.
El anuncio de la plataforma se realizó en el marco de un evento conjunto de la Caixa y la CNP Seguradora. Además del presidente del banco, estuvieron presentes la vicepresidenta de Vivienda de la institución, Inês Magalhães, y el vicepresidente en ejercicio de Sostenibilidad y Ciudadanía Digital, Jean Benevides.
Ampliación de Compromisos de Sostenibilidad
En la misma jornada del anuncio del BIPC, la Caixa Econômica Federal hizo públicos cuatro nuevos compromisos que se alinean con las directrices internacionales establecidas para el desarrollo sostenible. Estos objetivos buscan profundizar la integración de factores ambientales, sociales y de gobernanza (ASG) en las operaciones y financiamientos de la entidad.
El primer compromiso anunciado es la consecución del equilibrio de las emisiones para el año 2050. Este objetivo se traduce en alcanzar un saldo de cero emisiones netas, conocido en el mercado financiero y ambiental como Net Zero. La meta abarca la totalidad de las emisiones generadas, incluyendo tanto las emisiones directas (derivadas de las operaciones propias del banco) como las indirectas (provenientes de los proyectos, actividades y empresas que la institución financia).
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Un segundo objetivo se centra en la adopción de un modelo institucional basado en los principios de la economía circular. La meta de este compromiso es la eliminación del envío de residuos para incineración y la minimización del destino de residuos a los vertederos sanitarios (Zero Waste) antes de 2050.
La estrategia operativa para alcanzar este hito implica reducir al máximo posible la generación de residuos en origen y priorizar de forma sistemática la reutilización, el reciclaje y el compostaje de los subproductos restantes.
El tercer pilar de los nuevos compromisos se concentra en la expansión del financiamiento sostenible. La institución prevé que, para el año 2030, la cartera de crédito verde de la institución experimente un incremento del 50% respecto a los niveles actuales. De esta manera, se buscará alcanzar un saldo total de 1.25 billones de reales destinados a proyectos que cumplen con criterios rigurosos de sostenibilidad ambiental.
El cuarto compromiso refuerza la promoción de la igualdad de oportunidades y la equidad de género dentro de la estructura organizacional del banco. La meta establecida para 2030 es que al menos el 36% de los cargos de jefatura de unidad (funciones gerenciales) sean ocupados por mujeres. Este compromiso amplía las disposiciones estatutarias existentes, las cuales ya establecen que al menos una tercera parte de los cargos de alta dirección deben ser ocupados por mujeres.
El presidente de la Caixa, Carlos Vieira, subrayó que la presentación de estos compromisos constituye una fase estratégica en la trayectoria de la institución financiera. El BIPC y los nuevos objetivos no son considerados por la entidad como acciones aisladas, sino como elementos interconectados de una visión singular: la transformación del crédito en impacto positivo y del desarrollo económico en sostenibilidad ambiental y social.
El desarrollo e implementación de herramientas como el BIPC y la adopción de metas Net Zero y Zero Waste reflejan la alineación de la institución con los acuerdos globales sobre cambio climático y desarrollo sostenible, señalando una tendencia en el sector financiero hacia la internalización de métricas ambientales en la evaluación de riesgos y oportunidades de inversión.

