Clausura definitiva al delfinario Dolphinaris Barceló por maltrato a ejemplares marinos
- La Profepa impuso sanciones por violaciones a la Ley General de Vida Silvestre y presentó una denuncia penal ante la FGR por el caso del delfín Mincho.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) decretó la clausura total definitiva del delfinario Dolphinaris Barceló, operado por la empresa Acuario Arrecifal, S.A. de C.V., por violaciones al trato digno de ejemplares de vida silvestre y diversas irregularidades en sus prácticas operativas. Esta medida fue resultado de un procedimiento administrativo iniciado en febrero de 2025, durante el cual se llevó a cabo una inspección del recinto y la revisión documental correspondiente.
Durante la investigación se identificaron múltiples transgresiones a la normatividad ambiental vigente. Entre ellas, se documentaron prácticas durante sesiones interactivas que pusieron en riesgo la integridad física de los ejemplares, en contravención del artículo 34 de la Ley General de Vida Silvestre y la NOM-135-SEMARNAT. También se detectó la omisión de reportar un incidente peligroso ocurrido el 28 de noviembre de 2020, cuando el delfín Mincho se golpeó contra una plancha de concreto durante una acrobacia. Esta situación no fue notificada a las autoridades, a pesar de la obligación legal de hacerlo.
Adicionalmente, se comprobó que el recinto realizaba acrobacias con los delfines sin contar con la debida autorización en su plan de manejo. En particular, Mincho fue reincorporado a actividades con visitantes apenas dos días después de haber sufrido una lesión, a pesar de contar con una incapacidad médica de 15 días emitida por el veterinario responsable. Esta práctica contravino las disposiciones sobre el manejo de ejemplares en tratamiento médico.
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La Profepa también constató que en reiteradas ocasiones se excedió el número autorizado de personas en las interacciones con los delfines. Asimismo, se omitieron evaluaciones médicas periódicas, tanto mensuales como semestrales, requeridas para monitorear el estado de salud de Mincho. Las bitácoras del recinto mostraron además que, en diversas fechas, la temperatura del agua superó los 27 grados Celsius, incumpliendo los parámetros establecidos para el bienestar de la especie.
Como resultado de estas infracciones, la Profepa impuso una multa de $7,526,240 pesos y colocó sellos de clausura visibles en el inmueble. La titular del organismo, Mariana Boy Tamborrell, destacó que todas las instalaciones que manejan mamíferos marinos tienen responsabilidades legales claras y deben cumplirlas estrictamente. “Reiteramos nuestro compromiso de llevar a cabo acciones contundentes para asegurar el trato digno a los ejemplares de vida silvestre en cautiverio”, subrayó.
Denuncia penal por el caso de Mincho
Uno de los aspectos más graves del caso corresponde al tratamiento recibido por el delfín Mincho. En un video difundido en enero de 2025, se observa el impacto sufrido por el ejemplar durante una acrobacia realizada en 2020. De acuerdo con la Profepa, Mincho sobrevivió al accidente y actualmente se encuentra en otro delfinario, donde ya no participa en actividades de alto impacto. Tiene 35 años y es considerado el ejemplar más longevo del lugar. Presenta queratitis crónica en ambos ojos, con pérdida total de visión en el izquierdo y una capacidad visual reducida al 60% en el ojo derecho, actualmente bajo tratamiento.
Por este caso, la Profepa presentó una denuncia penal ante la Fiscalía General de la República contra quien resulte responsable. Los hechos podrían constituir un delito previsto en el artículo 420, fracción I, del Código Penal Federal, que establece sanciones de uno a nueve años de prisión y multas de trescientos a tres mil días para quien dañe, capture o prive de la vida a ejemplares de mamíferos marinos de forma ilícita.
