Deterioro de pesquerías pone en riesgo el derecho a la alimentación
- La pesca ilegal, el deterioro de hábitats y la falta de políticas públicas han generado una crisis pesquera que amenaza la seguridad alimentaria.
- Al menos el 23% de las especies marinas comerciales se encuentran en deterioro, lo que afecta a más de 47,000 familias que dependen de estas pesquerías.
En el marco del Día Mundial de la Alimentación, la organización de la sociedad civil, Oceana, dedicada a la protección de los océanos, advirtió que el deterioro de las pesquerías y el daño a los ecosistemas marinos en México están comprometiendo el derecho humano a la alimentación de millones de personas.
A través de un comunicado, la organización señaló que, a pesar de los más de 11,000 kilómetros de costas del país, la pesca ilegal, el deterioro de hábitats críticos y la ausencia de políticas públicas han llevado a una crisis que amenaza la seguridad alimentaria nacional.
La organización destacó la importancia de los productos marinos en la dieta de los mexicanos; sin embargo, problemáticas como la pesca ilegal, la destrucción de ecosistemas, la contaminación y la falta de políticas públicas han provocado el deterioro de las pesquerías en México, afectando a más de 380 mil familias que dependen de la pesca ribereña.
Renata Terrazas, directora Ejecutiva de Oceana en México, declaró que un océano abundante y saludable puede alimentar al mundo y aportar proteína animal de alta calidad, con una menor huella ambiental en comparación con otras fuentes de proteína.
TE PUEDE INTERESAR: Impulsan México y la UE economía circular para el sargazo
En este sentido, Terrazas enfatizó que el derecho humano a la alimentación debe ser un tema central en la agenda pública, lo que para México implica reconocer a la pesca como un sector clave para la alimentación y la seguridad nacional, y comprometerse con su recuperación.
De acuerdo con el Semáforo de la Pesca, una herramienta elaborada por la organización, al menos el 23% de las especies marinas de interés comercial se encuentran en una situación de deterioro. Esto significa que han rebasado su máximo rendimiento sustentable, por lo que requieren medidas urgentes de recuperación para evitar su colapso. Los datos oficiales indican que al menos 47 mil familias dependen directamente de estas pesquerías; sin embargo, se desconoce el número real de personas afectadas debido a la falta de información actualizada.
Entre las pesquerías que carecen de datos precisos se encuentran el camarón rosado del Golfo de México, la lisa del Pacífico y la langosta del Golfo de México y Mar Caribe. Esta falta de información dificulta la implementación de políticas efectivas para la gestión y recuperación de estas especies, lo que agrava la crisis y pone en mayor riesgo la seguridad alimentaria de las comunidades que dependen de ellas.
Ante este panorama, Oceana hizo un enérgico llamado al Congreso de la Unión para que se legisle con el fin de asegurar pesquerías sanas y abundantes, que garanticen una fuente sustentable de alimentos para la población.
Terrazas concluyó que no se puede seguir ignorando esta crisis, ya que cada día que pasa sin una legislación efectiva se pone en riesgo la alimentación de millones de mexicanos. La recuperación de las pesquerías no es solo un tema ambiental, sino un asunto de derechos humanos que, de lograrse, podría garantizar una fuente de alimentos sustentable para las futuras generaciones.
