NotasTecnología

Imparten curso de drones para vigilar la Selva Maya

Fortalecen vigilancia de la Selva Maya con capacitación en drones
Imparten curso de drones para vigilar la Selva Maya
  • La iniciativa fue impartida por la Cooperación Técnica Alemana (GIZ) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
  • Participó personal técnico de Áreas Naturales Protegidas de México y Guatemala, con el objetivo de crear una red de colaboración que incluya a Belice.

La Cooperación Técnica Alemana (GIZ) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) impartieron un curso regional para la formación de pilotos de Sistemas de Aeronaves Pilotadas a Distancia (RPAS), comúnmente conocidos como drones. 

El objetivo de la capacitación es fortalecer las capacidades de monitoreo, protección y vigilancia en las áreas protegidas que conforman la Gran Selva Maya, un ecosistema transfronterizo de vital importancia. El curso, dirigido a personal técnico de Guatemala y México, se realizó para mejorar la eficiencia en la conservación de los paisajes bioculturales y sentar las bases para una red de colaboración trinacional.

La formación se enmarca en las acciones del programa Selva Maya fase II y fue coordinada por la Reserva de la Biósfera Sian Ka´an. Durante el curso, los participantes adquirieron conocimientos sobre el funcionamiento de los RPAS, los marcos normativos vigentes para su operación en territorios protegidos y las técnicas para realizar vuelos seguros y efectivos en ambientes naturales complejos. Esta transferencia de tecnología es fundamental para la protección de la región.

TE PUEDE INTERESAR: Usan drones para combatir plagas en nopal en CDMX

El propósito central de esta iniciativa es doble. Por un lado, busca dotar al personal de campo de herramientas tecnológicas avanzadas que optimicen sus labores de vigilancia. 

Por otro, pretende consolidar una red de colaboración y conocimiento entre los pilotos de dron que operan en las Áreas Naturales Protegidas (ANP) de México, Guatemala y Belice, permitiendo un intercambio de experiencias y la estandarización de protocolos de actuación ante amenazas comunes.

La implementación de drones en la gestión de áreas protegidas representa un avance significativo en las estrategias de conservación. Estos sistemas permiten reducir costos operativos y minimizar los riesgos para el personal en campo, especialmente en zonas de difícil acceso. 

Las aplicaciones de esta tecnología son diversas y abarcan desde el monitoreo de la cobertura forestal y la detección temprana de incendios, hasta la supervisión de ecosistemas, la identificación de actividades ilícitas como la tala ilegal o la caza furtiva, y el seguimiento de procesos de restauración ecológica.

La Gran Selva Maya es el segundo bosque tropical más extenso del continente americano, después del Amazonas, y su preservación es un objetivo compartido por México, Guatemala y Belice. Este ecosistema no solo alberga una biodiversidad excepcional, sino que también es depositario de un invaluable patrimonio cultural y arqueológico de la civilización maya. La colaboración transfronteriza es, por tanto, indispensable para hacer frente a las presiones que amenazan su integridad, como la deforestación, la fragmentación del hábitat y los efectos del cambio climático.

En este sentido, la capacitación de pilotos de dron coadyuva directamente con los compromisos establecidos en la Declaración de Calakmul y con la visión del Corredor Biocultural Gran Selva Maya. Ambos instrumentos buscan unificar los esfuerzos de los tres países para resguardar los recursos naturales, la cultura de las comunidades locales y los servicios ecosistémicos que la región provee, como la regulación hídrica y la captura de carbono.

El personal que participó en el curso está adscrito a ANP estratégicas, incluyendo áreas del departamento de Petén en Guatemala, así como de las regiones sur-sureste y pacífico sur de México, bajo la administración de la Conanp. La conformación de esta red de especialistas permitirá una respuesta más rápida y coordinada ante contingencias ambientales, como los incendios forestales que frecuentemente afectan a la región, sin respetar fronteras políticas.

La adopción de tecnologías como los drones es un componente clave en la modernización de las labores de conservación. Permite a las instituciones obtener datos precisos y actualizados sobre el estado de los ecosistemas, lo que a su vez facilita la toma de decisiones informadas para la gestión del territorio. La información recopilada mediante vuelos de dron puede utilizarse para generar modelos predictivos, evaluar el impacto de fenómenos naturales o actividades humanas y medir el éxito de las políticas de conservación implementadas.

Con la conclusión de este curso, se espera que los nuevos pilotos apliquen las habilidades adquiridas en sus respectivas áreas de trabajo, contribuyendo de manera directa a la protección de la Selva Maya. La GIZ y la Conanp continuarán fomentando este tipo de intercambios técnicos para asegurar que la colaboración regional se traduzca en acciones concretas y efectivas para la salvaguarda de este patrimonio natural y cultural de la humanidad.

Síguenos en LinkedIN, en X y en Facebook