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Gas natural, la encrucijada ambiental y económica para el sureste mexicano

Gas natural, la encrucijada ambiental y económica para el sureste mexicano
Gas natural, la encrucijada ambiental y económica para el sureste mexicano

+El 35% de ese gas natural se utiliza para producir energía eléctrica.

+Las energías renovables podrán crear tres millones de empleos para 2050 según el informe del PNUMA.

CIUDAD DE MÉXICO. Las autoridades ambientales mexicanas mantienen el silencio ante el choque protagonizado por Greenpeace México y TC Energía, en torno al proyecto Puerta al Sureste, el gasoducto que pretende cruzar el Golfo de México y llevar gas natural desde Texas hasta territorio nacional. 

En agosto del 2022, Greenpeace México, de la mano con otras organizaciones no gubernamentales, alzó la voz para señalar el riesgo ambiental en el Corredor Arrecifal del Suroeste del Golfo de México (CASGM) y pidió a la la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) desechar los proyectos Gasoducto Extensión Sureste “Etapa I” y Gasoducto Extensión Sureste “Etapa II”.

A finales de ese mismo mes, en un evento público que se realizó en el Museo de Antropología e Historia,  Manuel Bartlett Diaz, director general de la Comisión Federal de Electricidad, y François Poirier, presidente y director general de TC Energy Corporation celebraron la consolidación de la Alianza Estratégica entre dichas compañías.

En aquella oportunidad el presidente de TC Energy agradeció al presidente mexicano por lograr dicha alianza y por el proyecto Puerta al Sureste, al que se refirió como fundamental para el suministro de la energía que México necesita para un futuro más brillante y que ofrecerá la oportunidad de atraer inversión y promover la prosperidad social. 

TC Energía destaca los beneficios que tiene el uso del gas natural y señaló que “el incremento del uso de gas natural en México como fuente de combustible limpia para la electricidad ha ayudado a la CFE a reducir sus emisiones de Gases de Efecto Invernadero en más del 50 por ciento, aún y cuando su generación de electricidad se ha incrementado en un 15 por ciento”.

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¿Es el gas natural una buena inversión?

En octubre del 2022, después de la denuncia pública hecha por las ONG´s y de la consolidación de la alianza entre CFE y TC Energy, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) publicó el informe ¿Es el gas natural una buena inversión para América Latina y el Caribe? De los impactos económicos al empleo y al clima del sector energético.

El informe del PNUMA señala que apostar por las energías renovables, en lugar de promover combustibles fósiles, incluyendo al gas natural, sería por mucho la mejor opción en términos económicos y ambientales, pues permitiría reducir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero. 

“Este informe muestra que el gas natural no es una alternativa barata ni de bajas emisiones. En cambio, la expansión de las energías renovables traerá la recuperación económica que la región necesita en medio de la pandemia de COVID-19, ahorrando US$1,250 mil millones y crear tres millones de empleos para 2050, entre otros mayores beneficios”, señala el informe.

Durante la presentación de éste, el 25 de octubre del 2022, Juan Bello, director Regional del PNUMA, señaló: ”La ciencia es clara, si continuamos en el sendero en el que nos encontramos vamos a caer en un precipicio. En todas las regiones del mundo estamos viendo los efectos dramáticos del cambio climático”.

Bello tomó como referencia los informes del Panel Intergubernamental del Cambio Climático, de la Agencia Internacional de la Energía y de la Organización Meteorológica Mundial, para subrayar que se siguen generando emisiones y para el año 2030 habrá 14 % más emisiones, en lugar de que éstas se redujeran a la mitad.

El profesor Jairo Quirós Tortós, investigador y autor principal del informe del PNUMA, señala que solamente el gas natural que se usa en América Latina equivale a unos 9 mil petajoules, lo que representa el total de energía que consumió Brasil en 2019.  

“El 35% de ese gas natural se utiliza para producir energía eléctrica, es decir se quema para producir energía eléctrica. Alrededor de un 20% se utiliza en el sector del transporte y el resto en el sector industrial para calefacción, para calentamiento. A nivel residencial, también, para calefacción, en transporte, en agricultura y en otros sectores de la economía”, señala el autor principal del informe.

Indicó que la región de América Latina es la que más sufre los embates del cambio climático y a pesar de ello hay países en los que se sigue invirtiendo en combustibles fósiles y en  gas natural. 

“México, Brasil y Argentina han aumentado sus inversiones en combustibles fósiles y en explotación, especialmente en gas natural”. 

¿El gas natural es una energía limpia?

Si al gas natural se le compara con el carbón o el petróleo, los efectos al ambiente son efectivamente menos dañinos, de acuerdo con Mark Radka, Jefe de la Subdivisión de Energía y Clima del PNUMA, en una entrevista publicada en el sitio web del PNUMA.

“Por lo tanto, “más limpio” probablemente no sea la mejor palabra para describir el gas natural. En todo caso, siempre y cuando las emisiones de metano asociadas al gas natural estén bien gestionadas, no resulta ser tan problemático en términos de calentamiento global como lo son el carbón y el petróleo”, expresó.

El informe señala que el gas natural libera Gases de Efecto Invernadero (GEI) compuesto principalmente por metano y tiene un efecto de calentamiento potencial 86 veces mayor que el CO2. 

Además, el estudio enfatiza que para controlar el calentamiento global, en el mundo ya no existe espacio para el uso de combustibles fósiles.

“Las emisiones de metano ya han causado un aumento de temperatura de 0,5°C. Lejos de ser una opción limpia o sostenible, las decisiones a favor del gas natural aceleran la crisis climática”.

El reporte del PNUMA exhorta a los gobiernos para que trabajen con el sector privado, dentro de un marco legal adecuado, facilitando las inversiones con contratos y garantías para que las inversiones se centren en el sector renovable.

El estudio sugiere que “la energía solar y eólica ya han alcanzado la paridad de costos –y en varios países la han superado– la generación basada en hidrocarburos, lo que hace que el camino de las energías renovables sea una opción sin arrepentimiento”. 

“Estas tecnologías van ganando año tras año la carrera por ser las fuentes más baratas de nueva generación. La región también tiene algunas de las mejores condiciones del mundo en términos de radiación solar y energía eólica”.

Así, las autoridades ambientales mexicanas deberán tomar la decisión de dar luz verde o no al proyecto Puerta al Sureste, respaldadas en evidencia científica, como la obtenida por Greenpeace México, junto con académicos de la Facultad de Ciencias Biológicas y Agropecuarias de la Universidad Veracruzana (región Poza Rica-Tuxpan), el Colectivo Interdisciplinario de Ciencia Aplicada y Derecho Ambiental, A.C. y el informe presentado por el PNUMA.

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